Lila
es una perra teckel negra que me regala su amistad todos los días. URI, en cambio, es una diosa: es la Unicornia Rosa Invisible.

De vez en cuando URI le hace alguna revelación a Lila -vaya Vd. a saber por qué- y Lila,
si le parece, me cuenta lo que cree haberle entendido a URI mientras paseamos por la Dehesa de la Villa. Yo me limito a transcribir en este blog algunas de estas fantasías perrunas. Para mí es un ejercicio de expresión escrita sin otro objeto que dar forma a las ideas informes que circulan por las cabecitas de los perros; ideas que, por otra parte, los perros no suelen contarnos a menudo, puede que por educación... o por prudencia; o porque no son muy habladores, o porque no les prestamos atención. ¡Yo qué sé!

Tú, lector, no tienes por qué sentirte obligado a leer estas monsergas; si lo haces, quedas advertido de que las revelaciones de la diosa URI, aunque sean indirectas, o quizás por eso, pueden causar daños irreversibles en el intelecto.

23 de junio de 2010

El efecto "Jabulani"

A estas alturas del Mundial, está claro que el balón oficial, el "Jabulani", es un balón "raro". Su comportamiento dinámico hace que los mejores futbolistas parezcan unos "tuercebotas" y que las "mejores" selecciones se parezcan a las "peores".

Basta dar una ojeada a Google para percatarse de la notable cantidad de críticas vertidas. Prácticamente, nadie habla bien de él, salvo Adidas -su fabricante- y los deportistas patrocinados por esta marca -que no pueden decir más que "amén", si es que quieren continuar con su contrato-.

¿Y qué es lo bueno de éste balón? Pocas cosas: básicamente, i) que es tecnológicamente cuasi-perfecto y ii) y que, a la postre, es neutral; o sea, que una vez en el campo, es igual para todos los jugadores, por lo que no valen las disculpas: ¡a jugar y a callar!

No pretendo tomar partido. Simplemente, hacer tres consideraciones:

1) Los balones de fútbol han ido evolucionando, es cierto, pero nunca hasta ahora se habían comportado así. ¿Porqué se introduce, precísamente, en la fase final del Campeonato Mundial de Fútbol un balón nuevo tan diferente tecnológicamente de los habituales, sin haber sido probado anteriormente en otros torneos oficiales como pudieran ser las fases de clasificación previa?

2) ¿Desde cuando a la FIFA le preocupa introducir la tecnología en los campos de fútbol? No es que sea malo, pero la FIFA a la tecnología siempre se la ha pasado por el arco del triunfo.

3) Es cierto que el balón es neutral. De hecho todos los balones lo son. Puestos así, podría utilizarse un balón de rugby, que es mucho más difícil de controlar. Sin duda sería neutral, pero tendría consecuencias nefastas para el fútbol que conocemos.

Conclusión: Ni perfección tecnológica ni neutralidad. La FIFA, en su afán recaudatorio, adjudicó la exclusiva al fabricante Adidas para sumistrar los balones "Jabulani" para jugar los "mundiales", sin más, por una pastizarra que sólo Platini, Blatter y alguno más conocen.

Y resulta que esos "jabulanis" se están cargando la ya escasa espectacularidad del fútbol, deporte difícil donde los haya, pués se juega con los piés. Eso sí, nos hartaremos de ver porteros cometiendo "cantadas" impensables, no veremos marcar goles a las estrellas, los resultados serán muy cortos, los pases -en largo y en corto- serán imprecisos como en los partidos del patio del colegio, los tiros a puerta saldrán altos o fuera de palos, los corners se sacarán en corto, no se meterán goles a balón parado y, lo que es peor, todas las selecciones parecerán ser igual de "malas". Gracias al "jabulani" preferiremos ver los partidos de los chicos del barrio a los partidos del mundial.

¡La FIFA se ha cargado la espectacularidad en el Campeonato Mundial de Fútbol de 2010! ¡Viva la FIFA!¡Viva el Jabulani!

1 comentario:

JMBA dijo...

EFectivamente, lo único bueno es que es neutral, igual para todos. Pero a los porteros les complica la vida lo que no está escrito.

Yo jamás hubiera imaginado que un balón de fútbol diera para tanto, que pudiera haber tantas variantes. Claro que el dinero...

De todas formas, yo propongo duplicar la longitud de las porterías, para poder ver un número elevado de goles en cada partido. Sería más justo...